La chica creó un evento en Facebook para celebrar su cumpleaños al que invitó a unos pocos amigos. El problema es que queriendo o sin querer dejó el evento público en vez de hacerlo privado, y se fue de las manos. A las pocas horas ya habían confirmado la asistencia 21.000 personas, y cuando la madre se enteró eliminó el evento rápidamente, pero el daño ya estaba hecho.
Ahora hay varias iniciativas para ir a los alrededores de la casa (la chica puso móvil y dirección en el evento) y celebrar una fiesta importante por allí. La policía ha avisado de que estará por allí y no permitirá que pase nada, pero habrá que ver quien puede más, si 20.000 personas con ganas de fiesta o la policía de Hertfordshire.